martes, 27 de agosto de 2013

Vía verde Alcoi - Agost.

Hoy traigo unas fotografías tomadas ya hace bastante tiempo, concretamente en la primavera del 2006, o año I a. c. (antes de la crisis), en sendas excursiones realizadas a la vía verde que discurre por el interior de la provincia de Alicante aprovechando la plataforma de la línea ferroviaria, que nunca llegó a entrar en funcionamiento, entre Alcoi y Agost, la cual pretendía dar continuidad hasta el mar a la línea que conectaba Xàtiva con Alcoi, uniendo esta última ciudad con la línea que comunica La Encina con Alicante confluyendo con la misma a la altura de Agost (cuya estación hoy también está cerrada). 

La historia de esta línea es, más o menos, como sigue: Durante la época de la Dictadura del General Primo de Rivera, al amparo del llamado “Plan Guadalhorce de Ferrocarriles”, en el año 1926, se empezaron a construir las infraestructuras del ferrocarril de vía ancha entre Alcoi y Agost. Con una longitud total ligeramente superior a los 66 Km. y un presupuesto aproximado de 82 millones de pesetas. La comarca del Alcoià necesitaba y reclamaba un transporte directo y eficaz para llevar sus mercancías hasta el puerto de Alicante, ya que los enlaces por vía estrecha hasta Gandía y Villena resultaban a todas luces insuficientes. Las obras se iniciaron dos años después, emplazándose a tres años para su completa ejecución. Sin embargo, los problemas orográficos de la complicada serranía alcoyana hicieron que la obra se retrasara hasta el año 1932 cuando finalmente quedó ejecutada con todas sus infraestructuras, y a falta sólo del tendido de las vías y de la construcción de las estaciones intermedias entre Alcoi a Agost (Ibi, Castalla, Tibi y Agost). La guerra civil (1936-1939) supuso un frenazo a la finalización de este proyecto pues las prioridades económicas en aquel entonces se encaminaron a la reconstrucción de los ferrocarriles afectados por hechos bélicos, u otros proyectos que estuvieran en una fase más madura de finalización. Aún así, las obras siguieron a un ritmo lento, prosiguiendo por puntos con el tendido del balastro, previo a la instalación de las vías, material que todavía hoy permanece en el paisaje como testigo histórico de un proyecto que no vería la luz. Las obras quedaron finalmente semiabandonadas por falta de medios a pesar de haber estado languideciendo hasta los años 60.


Posteriormente un informe del Banco Mundial con vistas a la concesión un importante crédito para el Estado Español consideró negativa la conclusión una serie de proyectos ferroviarios, básicamente los incluídos en el plan Guadalhorce, a los cuales no se les vio visos de rentabilidad económica por la mayor facilidad y economía de los emergentes transportes por carretera; estas razones determinaron la orden de paralización inmediata de las obras y de esta forma el Proyecto quedó abandonado sobre el terreno. Y, como ya es de sobra conocido, a finales del año 1984 se desestimó definitivamente la reanudación de cualquier tipo de obra en esta vía por el Ministerio entonces competente en la materia, fecha en la que también se clausuran gran cantidad de líneas hasta entonces en explotación comercial pero claramente deficitarias. 

No todo el recorrido entre Alcoi y Agost se encuentra acondicionado. Tan sólo los dos extremos del mismo, entre Alcoi y el paraje de La Canal (término municipal de Xixona) y entre Agost y las faldas del Maigmó. El primero de estos tramos acondicionados parte de la Estación de Agost y llega hasta el puerto del Maigmó, haciendo un recorrido total de 22 km. A destacar de su trazado, además de varios puentes, seis túneles y dos viaductos de cierta consideración, que salvan profundos barrancos secos de naturaleza yesífera. Seguidamente se muestran unas imágenes.



Embocadura de uno de los túneles de la línea, en fábrica de mampostería careada.
Un arco de medio punto realizado con dovelas pétreas da paso al tubo construido
en hormigón.

La línea discurre en sus primeros tramos entre profundos desfiladeros
que adaptan la suave pendiente del trazado a la accidentada
orografía de la zona.

Entre los puntos kilométricos 12 y 13, nos encontramos con el viaducto
del Forn del Vidre, de 140 m de longitud y preparado para vía única. Desde él
se puede incluso divisar la ciudad de Alicante recortada contra el mar.

Construido en hormigón armado con aplacado de sillares calizos en sus puntos
singulares, queda definido por dos grandes arcos de medio punto centrales que
salvan un profundo barranco de naturaleza yesífera.

El otro viaducto de importancia de la línea, construido con técnica mixta (arcos
de medio punto - pórticos de vigas planas), es el del Palomaret, de 200 m de longitud.

Potentes estribos revestidos de piedra caliza sirven de apeo a un colosal
arco de medio punto de homigón. Líneas de pilares gemelos soportan el tablero.

El arco central visto desde el fondo del barranco.

La vía verde discurre a través de túneles (alguno de longitud considerable), desmontes y terraplenes, y animada por un paisaje cambiante (desde los cultivos y las tierras áridas y secas de las áreas orientadas a la costa hasta los densos pinares de las faldas del Maigmó). Para saber más de la misma, tenéis toda la información imprescindible en este enlace.

Y aquí, el recorrido en mi perfil de wikiloc.

El segundo tramo, como decía en la introducción del artículo, parte desde Alcoi y finaliza en la partida de La Canal, en el término municipal de Xixona, después de recorrer diez kilómetros atravesando una cantidad apreciable de accidentes geográficos salvados con habilidad (y suponemos que importante capacidad presupuestaria) mediante túneles (hasta diez), terraplenes, desmontes, puentes y tres viaductos.

Al poco de abandonar el barrio alcoyano de Batoi, nos encontramos con este
airoso viaducto sobre el río Barxell. Dos arcos de medio punto y tres tramos
porticados soportan el tablero, preparado para vía única.

Desde este punto podemos apreciar los pilares (arriostrados
horizontalmente) que conectan el trasdós del arco con el tablero.

Sin embargo, el viaducto anterior queda empequeñecido por éste otro, conocido como de "Les Set Llunes" que salva el río Polop, y que esta formado, como su propio nombre indica, por siete "lunas" o arcos de medio punto. En este caso son arquillos secundarios de medio punto los que, apoyados sobre los arcos principales, soportan el tablero.

Construído enteramente en hormigón y decorado con aplacado simulando
sillares en las aristas de las pilas, salva el río Polop a una altura de 46 m.

Vista de una de las pilas y arranque de los arcos desde el
cauce del río.

El viaducto salva pequeñas terrazas de cultivo junto al río y
una incipiente vegetación de ribera.

El viaducto de Les Set Llunes, de 260 m de longitud, con las últimas nieves
del invierno al fondo.

La línea atraviesa sucesivos cordales montañosos ayudándose de túneles como el de la fotografía, de hasta un kilómetro de longitud. Andando, esto se traduce a estar unos diez minutos bajo tierra.

Interior del túnel más largo, revestido de hormigón y
 de una longitud total de 1013 m.

Finalmente, el otro punto de interés de la línea se encuentra sobre el conocido como Barranco de Sant Antoni, afluente del popular Barranco de la Batalla. Se trata de un airoso arco rebajado que conecta los dos túneles más largos del recorrido.

Dos potentes estribos que contrarrestan los empujes del arco rebajado
que salva el barranco de Sant Antoni.

En este punto discurrimos por el Parque Natural de la Font Roja. La fotografía
está tomada años antes de realizarse los túneles de la autovía A-7, que pasan junto
a este viaducto.

Al atravesar el siguiente túnel, salimos a un área más llana aunque situada a mucha mayor altitud, casi al pie de la Carrasqueta. La línea discurre entre cultivos y manchas de bosque hasta encontrarse con la antigua carretera nacional N-340 (CV-800). Para ampliar la información, podéis dirigiros a este enlace.

Pinchando aquí, aparece el recorrido en mi perfil de wikiloc.

Una excursión altamente recomendable, que puede completarse con la visita a los pueblos y ciudades de estas comarcas interiores de la provincia de Alicante. 

Hasta la próxima.

2 comentarios:

  1. Es curioso ver que estas infraestructuras se diseñaban con criterios técnicos generosos y evitando, en la medida de lo posible, los pasos a nivel.

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    1. ¿Tú crees que realmente se realizaban con criterios técnicos generosos? Es cierto lo de los pasos a nivel, puesto que ya se concibieron sin ellos, pero no estoy yo tan seguro en cuanto a pendientes mínimas, radios de curva, etc... fíjate que el Directo a Burgos, inaugurado en ¿1968? y clausurado recientemente (o con muy poca circulación) nunca ha sido una línea competitiva pese a acortar notablemente la distancia entre Madrid y la frontera francesa por Irún.

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