domingo, 7 de abril de 2013

Fin de semana (freak) en Ciudad Real



Señalización semafórica sobre una de las toperas de la Estación ferroviaria de Almagro
Como ya avanzamos en este artículo del blog, dedicado al viaje que hicimos hace algo más de un mes a Ciudad Real, no sólo nos dedicamos a ver lo que las guías turísticas ofrecen, sino que a Víctor y a mí nos encanta visitar las estaciones ferroviarias que nos vamos encontrando. Unas están a pleno rendimiento, otras prácticamente clausuradas, pero a todas ellas se les puede sacar partido de diversas maneras. En esta ocasión visitamos las ubicadas en Manzanares, Ciudad Real, Almagro, Puertollano, Valdepeñas y, ya a la vuelta, Hellín, ya en la provincia de Albacete.

Atardece sobre el viejo andén central de la Estación de Almagro.
Sin duda mis favoritas son las estaciones antiguas, muy anteriores a la Alta Velocidad, que sobreviven a duras penas con escasas circulaciones diarias. En ellas parece que se haya detenido el tiempo, pero todavía conservan, en mayor o menor grado de deterioro, aquellas instalaciones y servicios auxiliares que permiten imaginar la actividad que tuvieron en el pasado: idas y venidas de viajeros, carga y transporte de productos de la comarca. En estos pueblos de Ciudad Real nos encontramos con estaciones que ocupan grandes extensiones de superficie y cuentan con tinglados, muelles cubiertos, silos de grano y numerosos edificios industriales (bodegas, almazaras) en sus inmediaciones. A continuación mostramos una serie de fotografías.

Farola. Estación de Almagro.
Silo. Estación de Almagro.

En Valdepeñas nos encontramos con un edificio imponente, de los de mayor importancia de la línea que MZA construyó para unir Madrid con Andalucía en la década de 1860. En esta estación quedan todavía un par de silos de grano, tinglados levantados con sillares pétreos hexagonales y diversas construcciones auxiliares. Es de destacar también la marquesina de edificio, cuya estructura está compuesta de columnas de fundición de esbeltas proporciones a la manera corintia.

Tinglado. Estación de Valdepeñas.

Capitel de una de las columnas. Marquesina. Estación de Valdepeñas.

Las estaciones de Ciudad Real y Puertollano gozan de una mejor salud y de mayor número de circulaciones. Son estaciones de paso de la línea de Alta Velocidad Madrid-Sevilla y se levantaron a principios de la década de los noventa del pasado siglo. Ejecutados sus edificios con materiales y diseños poco pretenciosos (estructuras mixtas de acero y hormigón armado, y cerramientos de bloque de hormigón o ladrillo caravista), responden a otro concepto muy diferente al de las otras dos estaciones antes visitadas.

Acceso a la estación de ferrocarril de Ciudad Real.

Servicio Avant. Estación de Puertollano.
Como nota curiosa muestro la fotografía de la fachada del llamado Colegio Ferroviario de Ciudad Real, desde 2007 cerrado al haberse construido junto a él las nuevas instalaciones docentes. El edificio, levantado en 1924, espera a que se aprueben las partidas económicas que permitan convertirlo en el museo de Semana Santa de la ciudad manchega. Está situado a pocos metros de la primitiva estación de la ciudad, cuyo edificio aún se conserva en estado de semiabandono junto al Parque de Gasset.

Fachada principal del Colegio Ferroviario. Ciudad Real.

Tampoco podía faltar en nuestro viaje un recorrido por aquellos edificios de cierto valor o curiosidad que no recogen las guías turísticas, pero que siempre es interesante conocer. Todos ellos situados en Ciudad Real.

Mercado Municipal. Edificio de líneas racionalistas que alterna fachadas revocadas con bandas de ladrillo caravista.

Edificio situado en la confluencia de las Calles Calatrava y de La Paloma, con caracteristico chaflán curvo y cubiertas planas. Ambas fachadas gozan de una acusada horizontalidad y continuidad enfatizada por las impostas que la recorren en toda su longitud horizontal y las bandas de ladrillo que unifican las ventanas de la primera planta.

Edificio conocido como "Casa de la Radio", por haberse establecido en él la emisora local en 1934. Fue proyectado por el arquitecto municipal José Arias siguiendo pautas racionalistas mezclándolas con recursos más convencionales.

Edificio de la antigua Compañía Nacional Teléfonica. Acusada sencillez, tan sólo la portada neobarroca dispuesta en el chaflán permite algún alarde decorativo. Las tonalidades de los distintos materiales rompen la monotonía de la fachada.

Y, por último, en este viaje tampoco podía faltar la cartelería comercial tradicional, la que por desgracia va desapareciendo paulatinamente del paisaje comercial de nuestras ciudades.

Titanlux: Villanueva de los Infantes. La Hilandera y Los Valencianos: Valdepeñas. Terriza: Ciudad Real.
Para finalizar, lo hacemos con la señalización todavía visible sobre la puerta de acceso de una antigua casa de Peones Camineros situada en el núcleo urbano de Valdepeñas. La placa del antiguo Ministerio de Obras Públicas hace referencia a la antigua carretera comarcal C-415, Alcantarilla-Ciudad Real.

La placa muestra la designación numérica de la vía bajo el emblema del Ministerio.

Espero que lo hayáis disfrutado. Hasta la próxima.


3 comentarios:

  1. Hombre, las estaciones abandonadsa dan cierta pena. Y como siempre: dan ganas de ir a verlo todo...

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    1. Y además con ese toque "decadente" de las fotografías...

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  2. Comparto plenamente esta afición por las viejas estaciones o lugares donde aún quedan vestigios de épocas mejores. No conozco las estaciones citadas, tan solo la actual de Ciudad Real, porque hasta Almagro me desplacé en autobús, así que agradezco mucho tu esfuerzo fotográfico y la información que adjuntas.

    Mi interés aumenta cada vez que veo alguna foto de la abandonada estación internacional de Canfranc. Coincidirás conmigo en sus colosales dimensiones. Tengo entendido que es posible recorrer su interior mediante visitas guiadas. ¡Cuánto disfrutaría recorriéndola! :)
    Otra estación abandonada más cercana para mí, es la madrileña Estación del Norte. Un imponente y fantasmagórico edificio situado en la parte trasera de la estación Príncipe Pío. Si no la has visitado, seguro que lo harás ;)
    Imagino, te has sumergido bajo tierra para descubrir una estación de metro cerrada desde 1966 y que permanece intacta, con los carteles publicitarios habituales de esa década, las cabinas de los taquilleros, las señalizaciones, los azulejos que cubrían los andenes y túneles,... ¡Una experiencia recomendable! :)

    ¿Has estado alguna vez en el abandonado sanatorio de Sierra España?

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